Blogia
dianaluzanilla

LEWIS CAROL

LEWIS CAROL

Lewis Carroll amó la fotografía, amó la fantasía y tuvo auténtica pasión por las niñas, con las que fantaseó y a las que fotografió. Son fotografías de niñas serias, a veces se hacen las dormidas o están dormidas, pero en muchas de ellas las niñas miran al fotógrafo-espectador, sus miradas son inteligentes, cómplices, no están perdidas en el infinito donde los fotógrafos mandaban (y mandan) a sus modelos «no mires a la cámara», como si el modelo hubiera sido pillado en trance, privándonos de su mirada directa solo para nuestros ojos.  Una de sus fotografías mas interesantes, el retrato de perfil de Alicia Lidell en actitud pensativa, continúa siendo una foto cómplice, no transmite la idea de una foto robada. Si tenemos en cuenta que, en aquella época, para hacer una de éstas fotos era necesaria una exposición de entre diez y treinta segundos, la complicidad del modelo resultaba totalmente imprescindible. ¿Cómo conseguía Carroll esa inmovilidad necesaria de sus pequeñas modelos? ¿Inventaba cuentos y juegos para que ellas estuvieran quietas?, cómo debía disfrutar de sus sesiones de estudio, preparando su cámara «de suave, flexible palo de rosa» y tirando de articulaciones y goznes hasta que el resultado parecía «una complicada figura en el Segundo Libro de Euclides» (tampoco debemos olvidar que su otra gran pasión fueron las matemáticas).

0 comentarios